El pasado día 21 de Junio, aún no ha hecho el mes, afirmaba:
No me he equivocado y no solamente éso sino que, es la primera vez que lo veo en mis más de treinta años conociendo y teniendo esta variedad de hoya, después de haber echado, en cada nudo, sus correspondientes par de hojas, posteriormente les están saliendo nuevas guias en las mayoría de los nuevos nudos y mucho me temo que están apareciendo incipientes pedúnculos. De momento le cuento cuatro.
Haciendo honor a la verdad tengo que decir que se trata de un buen esqueje que corté en su día (ya sabeis como los prefiero) y que recibe el sol del amanecer.
Para saber que se iba a portar bien tengo que añadir que el tamaño de las nuevas hojas
ya formadas no superan los 8 x 4 cms. He de aclarar que las hojas formadas mientras estuvo a la sombra hasta enraizar (lo que hago siempre) alcanzan en algunos casos los 11 x 4,5 cms.
En cuanto al color me muestra la mejor tonalidad que pueden tener las hojas para verle incipientes pedúnculos en ese mismo año. Es un color verde, nada obscuro, o sea verde clarito y con un ligero toque alimonado.
Estoy muy orgulloso de este esqueje e intuyo que cuando termine este verano me habrá dado muchísimas sorpresas.
Espero que esto le sirva de ayuda a aquellos que os quejais de no verles flores a vuestra hoyas carnosas.
Como siga así voy a tener que escribir un libro (no me hagais caso que es pura broma), eso sí, que vayan aprendiendo los entendidos.
En resumen:
Esta es la mejor forma de saber si tu hoya carnosa te dará pronto flores.
Solo tienes que comprobar el tamaño y color de sus hojas
Y acuérdate de estas medidas: 8 x 4 cms.
En las dos últimas fotos he puesto una hoja arrancada del macetón (de la parte que tienes menos luminosidad) para que comprobeis la diferencia.
